Los beneficios de la meditación para un corredor van más allá de de la competencia, el principal beneficio que se logra con esta práctica es ser más conscientes: prestar atención enfocándonos en el momento presente, sin juzgar. Esta habilidad nos permite enfatizar nuestro enfoque, sumergirnos en un estado de concentración, y crear conexiones más profundas con los demás y con nosotros mismos. Algunos de los mayores beneficios que tiene el ser consciente al momento de correr son:
- Escuchar a mi cuerpo: así podré saber si esta muy cansado y decidir si bajo la intensidad del entrenamiento o descanso.
- Sentir mi cuerpo: podría notar algún dolor o incomodidad fuera de lo normal, lo que puede ayudarme a cuidarme de alguna lesión.
- Observar mis alrededores: además de poder admirar el lugar donde estoy corriendo me ayudará a cuidarme de riesgos (baches, semáforos) que pueda encontrarme en el camino.
- Disfrutar el momento: esa carrera o ese entrenamiento en específico no se volverá a repetir en tu vida por muchos motivos (clima, lugar, ropa, alrededores, sentimientos), entender esto nos ayuda a valorar el momento presente.
La evidencia científica de la meditación explica que su práctica regular puede ayudarnos con momentos emocionales, en este caso serian retos relacionados a la carrera. Puede disminuir la ansiedad por el rendimiento, manejar emociones a media competencia y canalizar nuestra voluntad para soportar momentos difíciles.
¿Cuándo debería meditar si quiero obtener estos beneficios?
Tener una práctica de meditación constante en la que te sientes y seas consciente de tu respiración por algunos minutos puede ayudar en todos los aspectos de tu vida. La clave es decidir querer empezar, y tal vez hacerlo de manera gradual para comenzar a convertirlo en un hábito.
También es posible meditar mientras corremos, es un momento en el que podemos reflexionar, explorar, sentir, y conectar con el mundo a nuestro alrededor. Esta comprobado que combinar la meditación con el running puede hacer a tu mente más fuerte. Si eres maratonista, sabes perfectamente que si puedes seguir o no va a depender en gran parte de tu fuerza mental como de tu entrenamiento físico.
Para comenzar a meditar mientras corres puedes intentar algunas cosas: toma 3 respiraciones profundas antes de empezar (inhala profundo, mantén el aire unos segundos y exhala profundo), y después ponte alguna intención: tal vez una duda que has tenido rondando tu mente por unos días y piensa que correr te puede ayudar con ello. Cuando estes corriendo, mira a tu alrededor y piensa en todas las cosas que ves, enfócate en tu respiración y tu postura, piensa en todas las partes de tu cuerpo (no solo tus piernas). Al finalizar, siéntete agradecido por haber podido correr. No hay una forma perfecta de hacerlo, solo inténtalo y ve qué se siente mejor para ti.
Sofía Cárdenas 
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